El Príncipe Valiente es un joven escudero de la Corte del Rey Arturo. Un día es reclamado para salvar Camelot de una invasión vikinga. En tan ardua misión el joven escudero descubre sus orígenes nobles y se convierte entonces en El Príncipe. Los vikingos ganan y tratan de destronar al Rey Arturo. Pero el Príncipe, ayudado por la intrépida princesa Ilene, lucha contra las adversidades y ambos se convierten en aliados tanto en la batalla como en el amor.
Crítica
Puntuación del crítico: 4
Bueno aquí tenemos la última aproximación que se ha hecho del Principe Valiente a la gran pantalla, lo malo es que está producción es realmente cutre, el problema es que se estreno cuando aún estaba muy reciente la EXCELENTE serie de animación de los años 90, y es que esa serie le daba mil vueltas a toda la película en general, la caracterización de los personajes (que por decirlo suavemente en la película es más bien nula) es sobervia, la acción, la trama, el sentido de la aventura, la música (el opening de la serie era glorioso). Pero bueno, lo que nos ocupa es la película y lo cierto es que parece haberse hecho con prisas, y no entiendo xq ya que nadie la esperaba, fue un fracaso en todo el mundo, el mostruo final era espantosamente feo y mal realizado, hecho con cartón piedra como mucho. Lo único destacable es que la película era entretenidilla pero que no hace justicia a ese gran personaje creado por Harold Foster. En fin otra vez será.
William el Sangriento
Ficha de Película enviada por YOTA M el 20 de Noviembre de 2004
Pues que quieres que te diga Ingnatius pero a mi la serie de dibujos de El Principe Valiente me parecía sensacional, francamente buena, con una banda sonora que te transportaba.
Absurda película donde las haya que profana la buena memoria del pobre Harold Foster. Discrepo con el señor Sangriento a la hora de elogiar la serie de animación que siempre me pareció mediocre, mal documentada, aburrida y completamente descafeinada.
Respecto al film, no comprendo la manía que tienen en Hollywood de tratar de cuadrar pésimos guiones, con personajes literarios o procedentes del cómic. Ciertamente siendo las múltiples peripecias de este personaje mucho más entretenidas, comerciales e incluso ingeniosas, no entiendo porque aún se empeñan en hacer guiones nuevos mucho peores.